22 de noviembre de 2012

Nada.

Me voy a donde el viento no me empuje demasiado, a donde tu ego no sea tan grande que pueda conmigo y con esto. Me voy a mi cabeza, a pensar en nada y a callar las voces del silencio. Me voy a donde realmente no moleste, porque aquí hay mucho ruido ya y demasiados cuadros que pintan paisajes en los que yo ya no hago nada.

20 de noviembre de 2012

¡Nuevo blog!

Bueno chic@s, como buena lectora que soy me apetecía muchísimo hacer un blog sobre libros, en el que poner sus fichas, recomendarlos, poner frases... Y lo he hecho. Ahora mismo es sólo un pequeño proyecto ya que le queda mucho para tener una "biblioteca" completa, pero por algo había que empezar.
¡Espero que os guste!
La biblioteca de Lily

2 de noviembre de 2012

Personas.

¿Os habéis preguntado alguna vez por qué somos tan crueles? Sí, lo que leéis. No entiendo por qué tenemos que ir juzgando a todo el mundo por la calle. ¿Os habéis parado a miraros? Todos tenemos algún desperfecto, y tampoco es cuestión de ir con la excusa 'soy humano' y 'todos criticamos' para así poder hacer lo que nos de la gana. Si en lugar de hablar mal nos parásemos a vivir nuestra propia vida, veríamos que quizá no somos tan perfectos como creemos y que hay más problemas de los que pensamos. Yo soy la primera que va por la calle y siempre tiene algún comentario para una u otro, no importa quién sea. Hasta que descubres que de ti pueden pensar lo mismo o incluso cosas peores. Y es entonces, cuando te das cuenta de que también eres vulnerable, cuando comprendes que ellos también se ríen de ti, se burlan, te critican, hablan, hablan y hablan. Es entonces cuando te sientas en tu habitación -o en medio de un parque, no importa- y piensas en el daño que te hace saber lo mal que puedes llegar a caer o lo que puede pensar otra gente de ti con tan sólo una mirada. Cuando sientes ese dolor, esa impotencia... entonces comprendes que por muy 'humano' que seas y por mucho que creas que puedes equivocarte, todo tiene un límite. Y si esa persona a la que miras mal o de la que, interior o exteriormente, comentas algo tiene defectos, tú también los tienes. Porque todos somos personas.

29 de octubre de 2012

Ni el tiempo...

Nos empeñamos en tener el control de las cosas, de las situaciones, de todo en general, cuando es algo imposible. Nunca podremos tenerlo todo bien ni, por desgracia, nos irá todo genial siempre. Tardamos años en cambiar cosas que no nos gustan y a veces no lo conseguimos del todo. También, en menor o mayor grado, se nos mete en la cabeza que la gente a la que conoces tiene que quererte o echarte de menos porque sí. Creemos que los tenemos ahí sólo por el hecho de que quizá nosotros sí estamos dispuestos a estar... pero a la hora de la verdad, ni siquiera un árbol perenne mantiene la totalidad de sus hojas. A la hora de la verdad, dos más dos no son siempre cuatro, las cosas que creías bien, no lo están siempre y a veces, ni siquiera el tiempo puede cambiarlas.

15 de octubre de 2012

Contigo.

A veces, frente a los gritos hay que hacer 'oídos sordos'. Y además, literalmente. Y cuando todo esté gris, no queda más que coger recuerdos y sonrisas y pintarlo todo de color otra vez. El otoño siempre va a llegar, nunca es verano para siempre. Ni tampoco invierno. Por eso ante las cosas malas hay que tener presente que siempre no va a brillar el sol: para que haya equilibrio tiene que haber lluvia también. Y las hojas caer, y nevar también... Lo único que no hay que olvidar es que aunque no lo veamos, el sol está ahí. Así que a veces hay que descolgar los sueños de las legañas mañaneras, y cumplirlos... Escuchar consejos, pero seguir tu propio camino sin hacer de ellos un modo de vida, ni dejar que las opiniones de los demás te afecten nunca tanto como para hundirte. Porque si alguien puede destruirte, eres tú mismo. Y si alguien te hace daño, es porque tú lo dejas... Así que jamás dejes que rompan tus metas, tus sueños, tus ilusiones... Nunca dejes que decidan por ti ni te lleven por el camino que tú no elijas. Porque si algo aprenderás mientras caminas, es que habrá quien quiera aprovecharse, quien quiera hundirte y hacerte daño... Pero nadie podrá nunca contigo...

30 de septiembre de 2012

Nothing really matters.

A veces, las canciones son una vía de escape tremenda... Hoy por ejemplo, me refugio en esta frase de Queen, de la tan conocidísima Bohemian Rhapsody, "nothing really matters." Porque si lo pensamos, nos solemos rayar por cosas que no son a veces tan importantes, y eso nos hace daño. Pero si nos detenemos a pensar un poco, ¿quién está ahí realmente para nosotros? Ni siquiera nuestra sombra. Y sin embargo, tantas son las veces que estamos preocupados por caer bien, por encajar, por ayudar... cuando la gente en realidad siempre mira a su ombligo, y ya no importa nada más...

¡Tenemos que querernos más, y no dejar que nuestra felicidad dependa de cosas tan pequeñas!

19 de agosto de 2012

Balanza.

Muchas veces me han dicho que lo mejor cuando tenemos un dilema, es pensar en equilibrar las cosas y decidir qué está bien y que no y cómo estás tú mejor: soportando lo malo y pasando poco a poco o, definitivamente, siendo egoísta y eligiendo lo que es mejor. Pero el dilema sigue estando, porque entran en juego sentimientos, recuerdos, momentos y sensaciones que no quieres perder por nada del mundo...y a la vez, para establecer ese equilibrio, no sólo tienes que sopesar las cosas malas, sino lo que has aprendido de ellas y cuanto has crecido. Llega un punto de la vida en que tenemos que decidir, por muy difícil que sea, si queremos vivir con todos esos sentimientos, momentos, recuerdos y sensaciones y con los días malos y sus rayadas y enseñanzas correspondientes o dejarlo atrás y empezar de cero. Y eso es lo realmente complicado: poner tu vida en una balanza...

¡Hola!

Se que hace siglos que no escribo nada. Es que estaba de vacaciones (?) No, ya en serio. El cargador de mi portátil está roto, así que una vez más yo estoy sin ordenador y desde el móvil (cuando decide funcionar) es una auténtica tortura escribir. Pero aún así, tengo muchísimas ganas de volver y expresar aquí lo que siento y que vosotros (si es que me seguís leyendo) tengáis la oportunidad de identificaros con mis textos :) Así que ahora después volveré a escribir por fin, después de casi dos meses. ¡Nos leemos pequeños!

26 de junio de 2012

Verano

Ya sí que no hay marcha atrás. El curso ha terminado prácticamente, tan sólo quedan unos días. Y habrá que decir hasta luego hasta septiembre, y a algunas cosas, un adiós para siempre. A cosas como mi almohada, mi cama y esas cuatro paredes que tantas cosas han visto este año. Esas cuatro paredes de la habitación que me ha acogido entre sus brazos cuando más lo he necesitado. Y me he perdido entre papeles, tinta y grafito muchas veces. Y entre notas altas de música desconocida.
Pero de nada sirve anclarse en lo vivido; mejor pensar en el día a día. Ahora vienen los días de descanso, de piscina, playa, sol, helados y noches largas sentados en nuestros propios recuerdos hasta bien entrada la noche, donde el calor no te haga perder la noción de dónde estás.
Ahora viene lo que todo el mundo espera con ansia: días para no hacer nada, para disfrutar hasta que queramos en la calle y luego dormir lo que nos de la gana. 
Sin embargo, aunque yo también tengo ganas de no hacer nada, de leer los libros que quiera, de poder acostarme cuando quiera, salir sin pensar en cuándo volver porque luego no tendrás que madrugar... no me entra en la cabeza tener que irme. Este año, más que ninguno, no quiero despedirme, porque supone alejarme de algo importante para mi. Muy importante de hecho. Supone alejarme de él, mi pequeño. Y aunque hay que organizarse para vernos y se que lo vamos a conseguir, sigo sin querer que acabe esto, que llegue definitivamente el verano...

18 de junio de 2012

Perdidos.

No voy a hablar de más tic-tases mudos, ni de más calles que nos absorben mientras el tiempo pasa impoluto. Porque si algo debemos saber, es justo eso.
Hay que acostumbrarse a que cuando algo sucede, ya no hay marcha atrás. Somos lo que elegimos, y no del revés. Siempre vamos a tener muchas opciones delante de las narices, y no somos alguien por elegir una u otra; es precisamente la elección lo que nos forma como personas.
Y a medida que pasan los días, todo cambia y a la vez es igual. Si de verdad queremos que algo mejore, deberemos volver a elegir. Lo único que es esencial es recordar que si nos olvidamos de nosotros mismos, entonces, estaremos perdidos.

17 de junio de 2012

Aprender.

Las respiraciones se atascan con los gritos de un reloj congelado para siempre en una hora demasiado repetitiva: 23:23. Las gentes chocan, se funden y corren con su típico estrés en noches llenas de prisa y más prisa. Nervios, ansiedad... ¿Acaso no saben que existen los paseos tranquilos y ciertas horas muertas para descansar del murmullo ensordecedor de la rutina? Creo que lo ignoran. Están demasiado ocupados en vivir con rapidez para pararse a disfrutar de lo que los rodea. Prefieren perder su tiempo creyendo que lo aprovechan, que aprovecharlo realmente.
Y las aceras estrechas los miran y sienten sus pies demasiado pesados ya, caminando de nuevo con rapidez. Y los coches no paran, y las agujas del reloj siguen congeladas porque nadie piensa en su existencia ya. Los árboles se quedan sin hojas, y de repente las vuelven a tener verdes. Verano, calor, sol y playa tocan a sus diminutas puertas, pero a veces no tienen tiempo ni para ellos. Nunca tienen tiempo de mirarse a sí mismos, de cuidarse, de ser egoístas. No saben serlo, y nunca parece que vayan a aprender...

11 de junio de 2012

Quizá.

Quizá es el calor o quizá los nervios porque todo está acabando. Quizá es el ruido demasiado atronador de las calles en hora punta, o mi propio murmullo interior lo que me hace echarte de menos así. Quizá es que hay demasiado peso en mi espalda o demasiadas gotas de sudor empañando sueños...
O quizá, simplemente, es que sigo sin resignarme y sin acostumbrarme a no ver tu cara u oír tu risa. Quizá sigo esperando que me des un caramelo cuando estoy triste... y sé que espero demasiado, porque el tictac de un mudo reloj me cuenta que es hora de entender que ya no estás...
La cuestión es comprenderlo o dejarlo pasar una vez más, guardando tu sonrisa en cada hueco de mí misma...
Y quizá hago mal, pero prefiero disfrutar con lo último, que decir adiós para siempre...

7 de junio de 2012

Silencio.

Casi ha terminado el curso. Los árboles están repletos de hojas verdes y el sol hace sus estragos en mañanas, tardes y noches ya demasiado calurosas. Las sábanas se confunden conmigo en una cama algo inccómoda y ruidosa. Mis sentimientos son cada vez más diminutos, es demasiado lo que se aprende dando cinco pesados pasos. Se aprende y se cambia; se crece como las hojas de esos árboles, como ese sol que sale cada mañana para que nos tostemos bajo su luz y calor. Y llega el día en el que te das cuenta de que hay demasiadas cosas que jamás volverán: te arrepientes de unas, deseas que regresen otras tantas. Llega ese día en el que miras el calendario y comprendes que el verano está aquí y que si algo pasa sin esperar a que te acostumbres ni siquiera a caminar, es el tiempo...
Y las gentes siguen con sus vidas, sin prestar atención a lo que les rodea apenas. Dejándolo de lado, ocupados con sus cosas, demasiado estresados para pensar en descansar y mirar lo que tienen...
Pero, al fin y al cabo, son cuatro patochadas más sin sentido. Es mi almohada, demasiado mullida ya, la única que entiende los gritos de mi silencio.

23 de mayo de 2012

Más.

Hielo. Son tantas las veces que lo escucho crujir en mis oídos, en mis pensamientos. Estoy cansada de buscarle sentido a gritos que en realidad nunca debieron salir de mi interior...
La luz del sol a veces me deslumbra demasiado, no quiero salir. Prefiero refugiarme en mis palabras, dejar trocitos de mi en el papel hasta desgastarme, porque sé que es algo que jamás va a juzgarme.
Y para qué mentir, soy yo la que sigue aquí, como la gilipollas que siempre fui. Caminamos buscando razones, motivos donde jamás los habrá... ¿Sabes lo que se aprende con el paso del tiempo? A crecer con los palos que te dan. A ser tú mismo, y nadie más.

20 de mayo de 2012

Vida.

¿Cuántas películas has dejado a medias? Y cuántos charcos has pisado para divertirte y sentir el agua  rozándote los dedos de los pies... ¿Cuántas veces te has disfrazado? Dime cuántas veces te has arreglado sólo para quererte un poco más.
Caminamos en busca de miles de sensaciones nuevas que nos hagan sentir grandes, o diminutos, qué más da; sensaciones que nos hagan valorarnos, caer, reir, llorar. Pequeñas piezas que nos completan como personas, que nos forman a lo largo de un camino que a veces se nos hace interminable.
¿Cuántas veces nos arrepentimos? Y tantas otras que nos arriesgamos...
Saltos, baches, caídas, grandes zancadas hacia la cima y a veces, muchas veces, pasitos pequeños. Para conocernos bien, para saber quénes somos y encontrarnos.
¿Cuántas tormentas has soportado? Menos de la mitad de las que aún te quedan. Pero dime, ¿cuántas veces más salió el sol para iluminarte? Si lo piensas, tu vida tiene muchos más arcoiris de los que recuerdas. La lluvia nunca es eterna.
Así que, si quieres ser grande, ten el valor de pegarte el tortazo y seguir adelante. Haz que se pregunten por qué sigues sonriendo. Haz que las pequeñas piezas que te forman, sean cada vez más importantes, hasta componer todas las notas de tu vida...

6 de mayo de 2012

Amistad.

Si algo he aprendido en estos días, y además mejor que nunca, es que no hay que creer en promesas de ningún tipo y tampoco confiar en nadie más que en uno mismo. Vas a estar rodeado de gente importante para ti toda la vida: quiérelos, valóralos, hazlos sonreír y no dejes que estén mal, pero no des nunca todo de ti. Guarda algo siempre, porque eso será lo único que no podrán destruir jamás si se van. Y créeme que se marcharán, porque todo forma parte de la magia que conlleva crecer y madurar. Nada es para siempre, ni siquiera la amistad.

18 de abril de 2012

Sueños.

Crecer. Con cada impulso del alma, con cada sonrisa, con una mirada, una caricia, un adiós...una caída. Y aprender a coger la felicidad con las manos, a disfrutar de lo que nos rodea, a no arrepentirse, a volar y soñar...a levantarse.
No hay nada más difícil que salir cada mañana ahí y enfrentarte al mundo con todo lo que hay en el y te rodea, pero no tenemos alternativa. Caemos en la cuenta de que hay que sobrevivir en un mar de ruido, miedo y superficialidad. Pero ¿y qué? Si algo hemos hecho siempre es avanzar persiguiendo ilusiones muchas veces absurdas, sin importar qué podía pasar por el camino, arriesgando siempre por conseguir lo que queremos.
Y es ahí donde nuestra humanidad es más tangible; donde los errores se nos ponen en bandeja y parece que nos gritan: '¡venga, cométeme!", animándonos a ser estúpidos. Es ahí donde elegimos ser, quizá, demasiado idiotas y obstinados. Es ahí cuando triunfa nuestro espíritu, donde nos fundimos con palabras susurradas en un oído extraño, donde nos perdemos en caricias insinuadas bajo sábanas de lija. Es ahí cuando verdaderamente crecemos. Al demostrar que pese a las veces que nos perdamos, siempre vamos a perseguir nuestros sueños.

14 de abril de 2012

Reseña: The host (La huésped).

FICHA TÉCNICA

Autora: Stephenie Meyer.
Título original: The host.
Título traducido: La huésped.
Publicación: 2008.
Saga: Sí. Por ahora sólo ha visto la luz este primer ejemplar de la que, según la autora, será una trilogía compuesta por dos últimos libros más: "The soul" (El alma) y "The seeker" (El/La buscador/a). La posible fecha de publicación aún no se sabe.


SINOPSIS

Cuando Melanie, uno de los pocos humanos salvajes que quedan, se ve capturada, está segura de que se enfrenta a su fin. A Wanderer, el «alma» intrusa asignada al cuerpo de Melanie, le advirtieron sobre los cambios que implicaba vivir dentro de un humano: las emociones irrefrenables, la abundancia exorbitante de las sensaciones, los recuerdos demasiado vívidos. Pero había una dificultad que Wanderer no esperaba: la anterior inquilina de su cuerpo se niega a renunciar a la posesión de su mente.

Wanderer se dedica a explorar los pensamientos de Melanie, esperando descubrir el paradero de ese remanente de resistencia humana. Por su parte, Melanie llena la mente de Wanderer con visiones del hombre que Melanie ama: Jared, un humano que sigue viviendo oculto.

Incapaz de separarse a sí misma de los deseos de su cuerpo, Wanderer comienza a anhelar al hombre que le han encomendado desenmascarar. Cuando fuerzas externas obligan a Wanderer y Melanie a hacerse aliadas, ambas emprenden una peligrosa e incierta búsqueda del hombre que aman.

OPINIÓN PERSONAL

La huésped es un libro, como poco, emocionante. En él no sólo vemos la evolución de la misma escritora hacia un mundo que, aunque igual de fantástico, va dirigido a un público más adulto que el de sus primeras publicaciones con la Saga Crepúsculo. No sólo es apreciable el cambio de estilo en la escritora, sino que el dilema que se crea en la historia y las reflexiones que te invita a tener dicho problema también son muy diferentes a las de las planteadas en sus anteriores libros.

En La huésped podemos ver la dicotomía que hay entre lo que eres y lo que aparentas; la diferencia, en pocas palabras, que existe entre cuerpo y alma.

Me encanta ese dilema en el que nos pone al tener que elegir entre el cuerpo de Melanie pero la personalidad de Wanderer; además, no es algo que sólo se plantea al lector, sino a los mismos protagonistas de la historia, haciéndolo así aún más explícito todo y, por lo tanto, más "tangible", ya que al leerlo, puedes casi sentir las crisis personales de los personajes al no saber ni ellos mismos diferenciar el alma del cuerpo.

También hay que decir de esta obra que es novedosa, ya que nunca antes se había escrito sobre mundos tan extraños como los que Meyer describe en ella, ni criaturas de esas características.

Para finalizar, tengo que decir que es el mejor libro que he leído de esta autora, no sólo por el hecho de que se nota su crecimiento profesional, sino porque es un libro capaz de emocionar y de llegarte muy dentro con la mezcla de sentimientos que hay en sus páginas.

13 de abril de 2012

Decepción.

Somos ilusos, por naturaleza. Con cualquier detalle mínimo, aunque haya mil veces que pensemos mal, solemos sonreír como verdaderos idiotas y creernos el cuento que nos transmite nuestro propio subconsciente, nuestra ilusión y nuestras ganas de soñar.
Pero con los años son tantos los palos que nos llevamos, que nos damos cuenta de que no existe ninguna Blancanieves ni Bella Durmiente, que ningún príncipe nos va a despertar de un sueño eterno con un simple beso; todo es sólo una maldita metáfora en un mundo cruel, otro cuento más, al fin y al cabo.
Esperar demasiado, sólo nos hace caer aún más bajo y hundirnos más, al no recibir lo que habíamos pensado. Lo mejor, te das cuenta con el paso del tiempo, es no esperar nada, dejar a un lado las ilusiones para así evitar una gran decepción.

10 de abril de 2012

Conmigo.

Si vas a caerte, que sea a mi lado en la cama. Si vas a tirar la toalla, que sea conmigo en la ducha. Tu sonrisa, que sea gracias a la mía; tus lágrimas que las sequen mis hombros y si me pierdo, que sea en tu boca y en tus brazos, que sea cuando me dices un te quiero. Si tropiezo, que sea tu mano la primera que encuentre y si me hundo, yo sólo pido que estés conmigo...

23 de marzo de 2012

Mundo.

No nos engañemos. En esta vida estamos y siempre estaremos solos, sin importar cuánta gente pueda rodearte, quererte o ser importante. Vamos a caer, nos vamos a hundir, y aunque esas personas estén presentes, en realidad el apoyo siempre va a faltar. Siempre vamos a ser solo nosotros; siempre seremos los únicos que nos entendamos, que sepamos cómo curarnos de verdad, cómo levantarnos, cómo afrontar las realidades que nos aplastan día a día.
Pero no sólo están los momentos malos. También en las alegrías estaremos acompañados, pero realmente sin nadie. Habrá demasiada gente, pero sólo tú como persona para verdaderamente comprenderte.
Por eso, ante todo, vive como siempre hayas querido, sin importar qué puedan pensar o decir. Arriésgate, sonríe, tómate tu tiempo donde más lo necesites, corre, respira, siente, respeta, sonríe de nuevo. Ama sin miedo a ser quien eres, sin miedo a darlo todo, porque hasta en esos momentos, estarás solo contigo mismo, con tus caídas y fracasos y, sobre todo, sólo contigo mismo y tus ganas de comerte el mundo.

18 de marzo de 2012

Nostalgia.

Hoy voy a poner de nuevo fragmentos de libros porque a parte de que me gusta, me lo han pedido :) Peeeero, voy a decepcionar un poco, porque sólo pondré citas de un sólo libro, que releería hoy mismo si pudiese... :)

La sombra del viento- Carlos Ruíz Zafón


"Sentí que me encogía la garganta, y a falta de palabras, me mordí la voz."


"Pocas cosas marcan tanto a un lector como el primer libro que realmente se abre camino hasta su corazón. Aquellas primeras imágenes, el eco de esas palabras que creemos haber dejado atras, nos acompañan toda la vida y esculpen un palacio en nuestra memoria al que, tarde o temprano- no importa cuántos libros leamos, cuántos mundos descubramos, cuánto aprendamos u olvidemos-, vamos a regresar."


"Como si hubiese querido buscar en las palabras la paz y la seguridad que la vida no había querido concederle."


"A veces creemos que las personas son décimos de lotería: que están ahí para hacer realidad nuestras ilusiones absurdas."


"Aquella fue la primera vez en que me di cuenta de que mi padre envejecía y de que sus ojos, ojos de niebla y de pérdida, siempre miraban atrás."


"Una de las trampas de la infancia es que no hace falta comprender algo para sentirlo. Para cuando la razón es capaz de entender lo sucedido, las heridas en el corazón ya son demasiado profundas."


"Las casualidades son las cicatrices del destino. No hay casualidades, somos títeres de nuestra inconsciencia."


"Como quien escapa a través de las páginas de una novela, porque aquellos a quienes necesitamos amar son sólo sombras que viven en el alma de un extraño."


"Las palabras con que se envenena el corazón de un hijo, por mezquindad o por ignorancia, se quedan enquistadas en la memoria y tarde o temprano le queman el alma."


"El hombre más sabio que jamás conocí, Fermín Romero de Torres, me había explicado en una ocasión que no existía en la vida experiencia comparable a la de la primera vez en que uno desnuda a una mujer. Sabio como era, no me había mentido, pero tampoco me había contado toda la verdad. Nada me había dicho de aquel extraño tembleque de manos que convertía cada botón, cada cremallera, en tarea de titanes. Nada me había dicho de aquel embrujo de piel pálida y temblorosa, de aquel primer roce de labios ni de aquel espejismo que parecía arder en cada poro de la piel. Nada me contó de todo aquello porque sabía que el milagro sólo sucedía una vez y que, al hacerlo, hablaba un lenguaje de secretos que, apenas se desvelaban, huían para siempre."


" Cada libro, cada tomo que ves, tiene alma. El alma de quien lo escribió, y el alma de quienes lo leyeron y vivieron y soñaron con él."







Y ahí lo dejo, que tampoco quiero aburrir jaja. Es un gran libro, muy recomendable. Este y por supuesto el siguiente (El juego del ángel).

Las frases las he cogido de diferentes sitios de Internet (obviamente no me las sabía de memoria xD) y simplemente os digo que me extendería aún más, porque hoy más que nunca, tengo ganas de perderme en una historia distinta, de recorrerme esas páginas de nuevo y volver a sentir todo lo que sentí en su día, duplicado, si se puede. Porque hoy tengo ganas renovadas y nostalgia, sobre todo nostalgia.

11 de marzo de 2012

Desaparecer.

Montañas rusas, y no hay más. Un día estamos en lo más alto: nos sentimos capaces de tocar el cielo con la punta de la lengua si queremos, de hacer todo lo que nos propongamos, de volar, sólo porque sí; y otro, sin embargo, pensamos que no servimos para nada: la autoestima desaparece y si se trata de hablar de la confianza en uno mismo, mejor callar y no decir nada. Vas paso a paso avanzando por un camino que a veces ni siquiera sientes tuyo: quieres correr por él hasta perderte, incluso intentas desviarte y alcanzar otros lugares distintos, alejándote de toda realidad conocida. Pero miras a tu alrededor en medio de la confusión y ves los esfuerzos de la gente porque estés bien, por alegrarte el día, por guiarte de nuevo por ese sendero que casi desconoces ya, enseñándotelo poco a poco, para que te encuentres a ti mismo...
... pero a pesar de eso, sentimos que quizá no es justo eso lo que necesitamos; quizá, lo que más deseamos en esos momentos es correr, olvidar... desaparecer.

9 de marzo de 2012

Encontrarlas.

Huracán, la única palabra con la que puedo describir ahora mismo la mezcla de sentimientos que hay en mi cabeza. Felicidad, ante todo. Desahogo, cariño, alegría, resignación, atrevimiento, riesgo, confianza creciente. Aparece por momentos la seguridad que jamás había tenido en mí misma, las ganas de seguir sonriendo pese a que todo pueda ir o vaya mal: porque con cada escalón que subo, los peldaños me enseñan que, pese a lo difícil que pueda ser la vida a veces, siempre habrá algo que te haga ver que merece la pena seguir escalando.
Así que no importa cómo sea de dura la subida hacia la cima, lo importante es llegar para atisbar aún más de cerca tantas cosas que creías perdidas pero que, sin embargo, sólo estaban escondidas, retándote a encontrarlas.

6 de marzo de 2012

Tiempo.

Hace mucho que decidí que, aunque me costara un grandísimo esfuerzo, no pensaría en nada negativo, que caminaría siempre de la mano de la mejor de mis sonrisas y que, ante todo, me dejaría llevar. Y hoy, pese a que me sigue costando, hago justo eso.
El futuro me mira desafiante desde su posición; el verano, una estación tan deseada por tantos, es temida por mí por demasiadas cosas: entre ellas, lo que puede quedarse atrás. Pero aunque me rete con su osadía, yo le respondo con mi sonrisa, más desafiante aún si cabe. No, no sé que va a pasar, ni siquiera sé dónde estaré mañana; nadie lo sabe y yo no pretendo hacerlo... Lo único que tengo seguro, es que voy a vivir los días como si cada respiración fuera la última, dando todo de mí en cada gesto, con un simple abrazo o una broma. Y lo que tenga que pasar, que ocurra, sin miedo. Porque lo que tengo ahora, mañana seguiré teniéndolo sin importar de qué manera; estaré aquí pese a todo y todos, porque lo prometido es deuda y porque me apetece seguir a su lado, da igual el tiempo.

25 de febrero de 2012

Sintiendo.

Perdí la cuenta de las veces que he querido correr y perderme. Pero también perdí la noción del tiempo y la sensatez, la suma de las veces que me he levantado. Tantas noches analizando mi propia vida, para llegar siempre a una conclusión que nunca he aplicado. Tantas lágrimas y tiovivos en mi cabeza para ni siquiera tener en cuenta que lo mejor es dejarse llevar sin pensar en nada... ¿Cuántas veces nos hundimos y nos llevamos por delante lo verdaderamente importante, perjudicandolo? Incontables...
Pero ya es hora de aplicar las cavilaciones, de actuar conforme a lo que saco de conclusión cuando pienso. Valorar lo que se tiene por encima de todo, sin importar el tiempo que puedas poseerlo. Y sentir sus manos sobre las tuyas, agradecer una simple sonrisa y dejarse llevar, como una pluma por el viento. Sin pensar, simplemente sintiendo.

20 de febrero de 2012

Libros.

Hoy me apetece poner fragmentos o simpleas frases de libros que he leído y que me han encantado :)

El Guardián entre el centeno (J.D. Salinger)

"No sé por qué hay que dejar de querer a una persona sólo porque se ha muerto. Sobre todo si era cien veces mejor que los que siguen viviendo."

En el camino (Jack Kerouac)

"Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida, mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas." 

Cumbres borrascosas (Emily Brontë)

"Me provocaba una mezcla tan variada de sensaciones que me hubiera resultado imposible dirigirme a él de forma racional.En primer lugar, su pasmoso parecido con Catherine me lo acercaba a ella de forma sobrecogedora.Pero esto, que podría parecerte el detalle más importante para acaparar mi imaginación, es realmente el más nimio, porque ¿ existe alguna cosa que no la acerque a mí y no me la recuerde? No puedo ni bajar la vista al suelo sin que sus rasgos se dibujen en las baldosas. En cada nube, en cada árbol, colmando el aire nocturno y refulgiendo de día a rachas en cada objeto, me veo continuamente cercado por su imagen. Los rostros más triviales de hombres y mujeres y hasta los propios rasgos de mi cara se burlan de mí, ofreciéndome su parecido. El mundo entero es una atroz colección de testimonios acreditativos de que vivió y de que ya la he perdido."

 ----------------------------------------------------------------------------------------------

"Dijiste que yo te maté ¡persígueme pues! Es verdad que los asesinados persiguen a sus asesinos. Creo… se que ha habido fantasmas que han vagado por la tierra. ¡Estate siempre conmigo…adopta cualquier forma…vuélveme loco! ¡Pero no me dejes en este abismo, donde no puedo encontrarte!"

The host (Stephenie Meyer)

“It's not the face, but the expressions on it. It's not the voice, but what you say. It's not how you look in that body, but the thing you do with it. You are beautiful.” 

(La he puesto en inglés porque así para mí tiene más sentido y es más bonita aún si cabe la comparación entre cuerpo y alma que hace aquí Meyer. Pero aquí va en español jiji ;) :

"No es la cara, si no sus expresiones; no es la voz, sino lo que dices; no es el cuerpo, si no lo que haces con él. Eres preciosa.")




El pensamiento Negativo (Risto Mejide)


"Creer firmemente en que nada dura...te ayuda a hacer que las cosas acaben durando." 

---------------------------------------------------------------------------------------------

"Espabilamos gracias a morder el polvo, comernos los ''yo nunca'', aguantar unos cuantos ''ya te lo dije''. Caerse una y otra vez, para lo cual es indispensable haberse levantado en otras tantas ocasiones."

-----------------------------------------------------------------------------------------------

"Crecer es aprender a despedirse. El día que te das cuenta de que crecer va a significar despedirse de personas, situaciones, emociones, memorias, ilusiones e incluso amigos que se supone iban a estar para toda la vida. El día que ves que crecer significa conocer cada día más gente que ya murió.El día que te das cuenta que te despides mejor que hace un año. Que ya no te sorprende que la gente desaparezca de tu vida. Ese día estás aprendiendo a decir adiós, ese día estás creciendo."

------------------------------------------------------------------------------------------------

"De un simple y puro ''te quiero'' pasas al ''te quiero mucho'', ''te quiero como no he querido antes'',''como nunca querré a nadie'', etc.Y es que ese primer ''te quiero'' se te gastó de tanto usarlo con tanta gente que al final se fue, llevándose cada uno su pedacito de verdad."

Memorias de Idhún (Laura Gallego)

Shail: -¿Por qué no lloras?, ¿acaso no lo echas de menos?
Victoria: -Los muertos no lloran.
Shail: -Pero, Vic, tú no estás muerta.
Victoria: -Tal vez no, pero dime, Shail, ¿se puede vivir con medio corazón?

------------------------------------------------------------------------------------

"Creo que soy más feliz contigo con todo lo que eso implica que sin ti."

-----------------------------------------------------------------------------------

"Lo único que puedo pensar ahora es que quiero verla otra vez. Quiero ver su sonrisa y esos ojos tan increíbles que tiene. Quiero… abrazarla de nuevo y no dejarla marchar nunca más."

-----------------------------------------------------------------------------------

"¿Sin ti? Nunca."






Y eso es todo, aunque podría poner muchiiiiiiiisimos más fragmentos de muchísimos más libros que me he leído, pero otro día, que sino esto se hace demasiado largo :D
¡Espero que os guste!



19 de febrero de 2012

Camino.

Dormir. Sin que nada te moleste, sin que nadie te interrumpa, sin que pensamientos idiotas se cuelen en tu cabeza como moscas. Dormir para evadirte del ruido, del mundo, de la vida, de todo un poco. Sí, a veces sólo queremos huir de todo lo que nos rodea, pero eso no tiene mucho sentido.
Lo mejor es plantarte, decidir qué quieres y cómo lo quieres y por supuesto, conseguirlo. No importa cuánto tardes, siempre va a merecer la pena. ¿Por qué sentir miedo? Lo cierto es que es algo irracional y bastante invebitable: cuando todo va mal o tú lo crees así, todo tu ser se activa en contra y sólo quieres correr y perderte. Pero a pesar de todo, tienes que buscar una salida que esté al alcance de tu mano y que no sea escapar, porque si algo somos aunque a veces ni nos lo creamos, es fuertes. Somos valientes y capaces de enfrentarnos al mundo, aunque nos parezca imposible.
Aunque a veces tengamos esos días en los que lo único que queremos es estar solos, pensar, dormir, pasar completamente de lo que nos rodea -y a la vez, sentirnos más queridos que nunca-, siempre habrá algo por lo que merezca la pena sonreir, siempre habrá otro camino.

14 de febrero de 2012

Oscuridad.

No se trata de levantarse, de estar en todos y cada uno de los buenos momentos, de reírse... es algo más. Es saber afrontar los precipicios, estar en los momentos malos sobre todo, y no de reírse, sino de pintar esas sonrisas. Se trata de caminar rompiendo los relojes que a veces nos encadenan, de dejarse llevar, siendo uno mismo en cada tic-tac. Es saber compensar un día pésimo con uno mil veces mejor, saber enfrentarse a los miedos y, cuando haya tormenta, no huir, sino aprender de los errores y del mal tiempo bailando bajo la lluvia. Es también acertar al evadirse del mundo si sabemos que no podemos con ciertos baches o curvas, pero al menos, no perjudicar a nadie. Es vivir al límite, disfrutando de cada respiración como si fuese la última, de cada rayo de sol como si estuviera atardeciendo. Equivocarse, para así aprender. Caerse, porque sino, nunca sabremos qué significa levantarse. Correr sólo para poder andar lenta sintiendo el camino cuando más te apetezca. La vida es todo eso, y más. Es amistad, es riesgo, son caídas, tropiezos, un tira y afloja en el que puede pasar de todo: ganar... y perder. Pero pese a eso último, la vida es positiva. Vívela, no importa cuántas veces te hundas: siempre habrá alguien dispuesto a sacarte de tus abismos. Y lo más importante, sonríe siempre, sin importar la oscuridad.

8 de febrero de 2012

Diez.

Me encanta escribir, más que nada. Un trozo de papel puede ser para mi la mayor liberación que podáis imaginar. Amo huir del ruido de mi cabeza mezclándome con la tinta de un bolígrafo o el grafito de un lápiz.
Pero tambien me gusta evadirme escuchando música a todo volumen, cantar (o destrozar, como prefiráis) en voz alta y bailar como una loca mientras tanto, sin nada que me moleste ni nadie que me mire para reirse. También adoro acurrucarme en la cama en invierno con tres pares de calcetines si es necesario, andar sin zapatos por toda la casa y en verano, sentir la arena de la playa en la planta de los pies. Libros, otra cosa que también me flipa. Siempre que comienzo a leer me sumerjo de tal manera en las palabras, me meto de tal forma en la historia, que la hago completamente mía. No es la protagonista ni es su vida; soy yo y es la mía.
Dulces, sublimes. No he conocido placer más gratificante que meter una cucharilla dentro del bote de Nutella, comer lacasitos o cualquier tipo de chocolate cuando te apetezca.
Reírse, mi mejor medicina. Soy masoquista, le doy cuatrocientas vueltas a todo y si no tengo problemas, no importa, porque soy pesimista por inercia. Diría que casi bipolar, porque pese a todo lo que a veces me rodea y pese a que a las muchas veces que la cago, si algo he sabido hacer es salir adelante, riéndome. Me encanta burlarme hasta de mi sombra, porque tendré mil defectos, pero soy así y aunque a veces cueste, me acepto tal y como soy.
Las sonrisas mi delirio, y los ojos aún más. Podría pasarme horas mirando unos mismos ojos para descubirir todos los matices que tienen sin aburrirme. También podría pasar horas mirando cómo alguien especial me sonríe, sólo porque soy yo misma, con mi locura siempre a cuestas.
La nieve me derrite: pocas veces he experimentado eso de coger una bola de nieve y moldearla, pero nunca había sido tan feliz como entonces, cuando recuerdas la inocencia de tu infancia al sentirte pequeña de nuevo haciendo muñecos. Y hablando de nieve, los helados, hasta en invierno. Me duelen los dientes, pero hasta eso se me olvida cuando disfruto de uno de ellos.
Me gustan muchas cosas pero sobre todo, que me abracen cuando tengo frío, que me canten aunque no sepan, que me sonrían porque sí, que me cojan de la mano para sentirme de nuevo pequeña, que me susurren un "te quiero" al oído para que solo yo pueda oírlo, que me rocen la espalda o el cuello y los escalofríos me hagan volar, que se pasen horas hablando conmigo de todo y de nada, que me cuenten hasta su más pequeña tonteria, haciéndome sentir importante porque sé que ante todo, cuentan conmigo...
Me gustan muchas cosas, sí, y entre ellas los números impares pero, por irónico que parezca, si hay algo que realmente me encanta, es el seis... y el diez.


7 de febrero de 2012

Sonrisa.

Simplemente, existen. Son aquellos que cuando tienes ganas de dormir, de que todo desaparezca, de que nadie ni nada te moleste, de que no entren más moscas absurdas en tu cabeza... vienen. Te buscan y te encuentran con la misma facilidad con que encontrarían un coche rojo en un desguace lleno de coches completamente negros.
Y con una simple mirada, ya saben qué te pasa. Entonces es cuando verdaderamente te sientes segura, cuando sabes que puedes contar cuatro mil cosas distintas durante horas, que sus oídos nunca van a cansarse y no sabes cómo, al final de todo, saben hacerte sonreir. Si no están cerca, te llaman tan sólo para ver si aún sigues respirando. Y llena y llega mucho que se acuerden de ti, aunque sea para decirte buenas noches.
Cositas como esas hacen que todos los amigos sean especiales, sí. Pero hoy, en concreto, hablo de uno sólo. Mi pequeño guardaespaldas en las fiestas, que me tapa mientras bailamos. Mi compañero de risas, chistes y locuras. También mi compañero de criticoneo, todo sea dicho jajaja.
Sí, él, con sus abrazos, con sus bailes, con las fiestas en su casa, con sus llamadas para decirme que es demasiado pronto para irme a dormir... pero sobre todo, por su amistad: por esos días de luz que me ha dado cuando todo se volvía más oscuro, casi sin saberlo. O por esas llamadas (sí, nos encanta hablar por teléfono) cuando menos lo esperaba, para preguntarme simplemente cómo estoy y subirme el ánimo.
Sí, él, mi pequeño gran amigo. Paco, el que tantísimas veces ha sabido pintarme, cuando más lo necesitaba, mi mejor sonrisa.

24 de enero de 2012

Fuertes.

Después de todo, sigo pensando en la relatividad de las cosas que nos rodean y en la del tiempo, sobretodo. Apenas cinco miserables minutos sirven para imaginar una vida entera, y también para que una amistad que existía, se esfume como si nunca hubiese estado ahí.
¿Cómo es posible que las cosas sean tan distintas de apenas un día para otro? Que sin motivos, sin lógica y sin causa todo se pierda es, como mínimo, frustrante.
Pero han sido demasiados los días que le he dado vueltas y eso no es bueno, que uno se marea. Es la vida la que da las vueltas, el verdadero tiovivo; no mi cabeza. Y por eso, aunque al principio doliera y ahora de alguna manera esté presente, el tiempo pasa con esa misma relatividad de siempre: si estamos mal, muy lento; si estamos disfrutando, rapidísimo. Y si estamos olvidando, no importa... sigue pasando, haciéndonos a cada segundo más fuertes.

22 de enero de 2012

Sueños.

Quizá hay veces en que son muchas cosas las que nos agobian, las que nos apalastan, nos explotan... El ser humano es demasiado egoista como para darse cuenta de que lo mejor es superar los baches, saltar los precipicios, levantarse y salir del barro por muy hundido que esté... y lo único que hace es dejarse caer más profundo aún, arrastrando con él muchas veces a personas que lo único que han buscado siempre es ayudar, hacerle sonreír. Y no sólo las arrastra, sino que también las agobia, las aplasta y las explota; las hace sentir como él se siente tan sólo porque necesita compasión, sentirse querido, porque quizá lo que más siente es miedo de la propia soledad.
Pero además de egoísta, el ser humano también es capaz de darse cuenta de que a veces, esos comportamientos cansan; de comprender que quizá está echando a quien tenía cerca por ser como es; el ser humano también es capaz de arrepentirse y cambiar. Porque sabe que aunque haya mil motivos para estar mal, no debe priorizar los problemas, sino que debe superarlos poco a poco, siempre con una sonrisa en la cara. Entiende perfectamente que si quiere mantener lo que realmente hace que camine bien, sin miedo, debe ser él mismo, dejando los baches atrás.
El ser humano es egoísta y mezquino muchas veces, pero también es increíble y sabe reconocer sus errores. Lo que hace que sea único y especial. Además, si algo es capaz de hacer, es disfrutar del simple placer de una sonrisa, del sabor de una lágrima y de correr sin parar para no perder lo que quiere, siempre detrás de sus sueños.

18 de enero de 2012

Aquel 28... :)

No sé qué escribirte, porque no quiero que sea la típica entrada bonita o seria... Así que empezaré por lo más simple: un 28 de diciembre (los Santos Inocentes) en el que la ironía decidió reírse en mi cara y el miedo dejar libre el camino. Un día en el que rompiste mis esquemas, me dejaste sin argumentos y sin palabras (cosa difícil, ya sabes). Un día especial que cada vez que recuerdo, no puedo evitar sonreír. Porque como te he dicho mil veces, entraste poquito a poco en mi vida y cuando menos me lo esperaba, te eché de menos y me dio miedo, porque eras mi amigo. Y lo que menos quería era sentir algo, o ser débil, que era como yo lo veía entonces. Si a algo tenía verdadero pánico era a que pasara algo y a perderte, como ya sabes.
Pero no sólo te colaste casi sin querer, sino que desde aquel día de los inocentes (mi día jaja) has estado aún más cerca, con miles de detalles y cosas con las que te has ido haciendo cada vez un hueco mayor, con las que has ido consiguiendo que yo, la cosa más insegura del mundo, se sienta confiada, segura y no tenga miedo a cada paso que da. 
Así que no cambies nunca, Fabi :)

15 de enero de 2012

Inolvidable.

Faltan diez minutos para las doce, y ya empiezo a estar nerviosa. La única persona conmigo en ese instante es Clara, que se ríe de mí y mis caretos antes la pantalla. Doce en punto después de diez minutos que más bien han parecido dos segundos: ¡felicidades, vieja! Pues aquí estoy, con diecinueve años, aunque sea de manera tan poco literal, ya que apenas he comenzado a vivirlos. Y de qué manera.
La primera noche de vida fue increíble: tuve tarta de palomitas, miles de fotos, música, sonrisas, gritos cantando Camela y risa, mucha risa. Pero no sólo eso. También, aunque no presentes conmigo en ese momento, estuvieron mis amigos. Mediante sms, llamadas fallidas porque mi móvil no funciona, comentarios y whatsapp. Y se propusieron hacerme llorar entre todos y cada uno a su manera aportó un granito de arena. Y la vieja casi llora. Pero solo casi, eh.
Cuatro de la madrugada: dolor de cabeza, de garganta y sueño. Clara y yo nos vamos a dormir, muertas. Pero llegan las doce y media del medio día y nos vamos de tapas. Después de todo el día en el centro haciendo el longui y comiendo como cosacas, volvemos al piso que hay que arreglarse, porque por la noche: ¡fiesta! Y aunque me volvía a faltar gente, la noche fue genial. El botellón algo aburrido al principio, pero luego se animó -o quizá me animé yo, quién sabe.
Si algo sé, es que con amigos así, sobra todo. Porque los que no estaban presentes, de alguna forma estaban; y los que estuvieron, hicieron que mi día fuese especial, muy especial. Lo que me tuve que reir comiendo pipas con Irene, Clara, Damián y Fabi. Y más aún me reí con Paco, Rivera y Sergio, cuando estuvimos contando chistes. Aunque al final me quedé con ganas de ir a Granada10 para bailar con Lucía, la noche terminó mereciendo muchísimo la pena.
No lloré, chicos. La abuelita se emocionó, pero no lloró. Muchísimas gracias por este 14 de enero tan genial a los que no estuvisteis: Desi, Natalia, Sandra, Julia, Maria José, Marta, Eli, Ester, Cristina, Inma, Mario, Roberto, José Alberto y Sergio. Y a los que estuvisteis: Clara, Irene, Lucía, Damián, Sergio, Rivera (aunque te conozca de poquito) y Paco.
Que nooo, que no me olvido de ti. Gracias Fabi, por hacer tú también que esto haya sido inolvidable.

14 de enero de 2012

Vejez.

Cada viernes, a las 16:48 pasa el mismo autobús de siempre y yo, con la misma maleta que cada viernes, me subo. Y cada viernes, está la misma persona sentada en el mismo sitio. Me mira, me sonríe y casi me guiña el ojo. Es como nuestra pequeña rutina, un pequeño secreto que compartimos. No nos hablamos, no sé quién es ni él sabe quién soy, pero de algún modo nos conocemos. Llevamos así más de dos meses, y hoy pensaba decirle algo. Un simple "hola" con la misma sonrisa de siempre. Pero hoy no ha venido y puedo decir que casi lo he echado de menos. Su sitio estaba ocupado por otra persona y entonces he comprendido lo que es la vida.
Hoy cumplo diecinueve años, y en broma digo y me comentan lo vieja que soy. Pero creo que aún no llegamos a darle valor a lo que nos rodea: a un simple día de lluvia, a un rayo de sol que te toque el pelo, o a una mirada de un desconocido, que paradójicamente ya conoces, en el mismo bus de siempre, a las 16:48. Y hoy he echado de menos esa cara: porque yo estoy en la flor de la vida, pero a él ya se lo ha llevado la vejez.

11 de enero de 2012

Yo.

Eres la métrica enigmática que envuelve mi ser y lo salva,
el idioma con el que los dioses hablan, eres música.


Nach- El Idioma de los dioses


_______________________________________________________________________

Take me to the magic of the moment, on a glory night where the children of tomorrow dream away in the wind of change.

Scorpions- Wind of change.


________________________________________________________________________

I just want to live while I’m alive 'cause it’s my life!

Bonjovi- I'ts my life.


_________________________________________________________________________


Y por último, una de las mejores frases que yo he leído nunca:


Solamente soy yo, ¿sabes? Solamente yo. Muy desorganizado de vez en cuando, organizado de vez en cuando y... solamente yo.


Freddie Mercury.

10 de enero de 2012

10193 :)

Iba atacada. Primer día de universidad, no conocía a nadie y ni siquiera sabía dónde mirar. Venía de haber estado de fiesta, con los ojos pegados y después de dar muchísimas vueltas para encontrar la clase, me senté en el que ahora es mi sitio favorito de esas escaleras tan conocidas.
Recuerdo que cuando entré a clase, ya hablaba con Marta G.C. Pero también recuerdo que cuando nos sentamos, entraste con cara de asustada y te sentaste a mi lado. Y yo como siempre, hablando sin parar, hasta que conseguí que te rieras.
Estábamos también muy concentradas cogiendo apuntes del correo y etc en la primera clase de español del curso. Creo que desde entonces, no he vuelto a estar tan atenta. Claro, también cuenta que era el primer día y que no sabía ni cómo serían las clases; por eso copiaba todo lo que la profesora decía.
Nunca más he vuelto ni a sentarme en ese sitio, después de las primeras semanas, ni a atender demasiado en clase. Pero algo que siempre voy a admirar, es tu fuerza de voluntad. No sólo por sentarte y copiar, sino porque intentas que tus amigos hagamos algo, nos animas y siempre aconsejas. A mi sobretodo, que te sabes mi vida y, si cabe, la mayoría de mis cicatrices.
Es por eso, entre otras muchas cosas, por lo que escribo esto. Para agradecerte que aquel día te sentaras a mi lado y me dejaras entrar en tu vida, regalándome no sólo la primera sonrisa, sino muchas más. Para decirte que mi mano también estará siempre, al igual que la tuya ha estado, por si te caes, sujetarte- y lo de caerte lo digo figuarada y literalmente jaja. Pero más que todo eso, para decirte que nunca cambies, que eres genial y muy especial. Que espero que esto sea así los cuatro años de facultad y luego, otros cincuenta más. Que este es el primero de muchos cumpleaños juntas, que lo sepas. Y por último, que lo de te quiero, se te queda corto.

7 de enero de 2012

Aprender.

Hay veces que mientras caminamos miles de imágenes asaltan nuestra cabeza. Intentan ser cada una la primera a su manera, sin comprender que somos nosotros quienes decidimos qué lugar ocupan. Cada cosa en su lugar, pensamos, sin tener en cuenta que hay veces en que el orden tampoco es demasiado importante. Nos empeñamos en que todo tenga sentido, en comprender por qué un simple suspiro es violeta o del color del alma. Le buscamos las siete patas al gato, como si nos fuera la vida en ello, simplemente porque necesitamos que todo tenga sentido. Sin más.
Pero a veces hay que superar los prejuicios y dejarse llevar sin buscarle un orden a las cosas. Vivir cada experiencia como si fuera única y de todo lo que nos suceda, aprender.

6 de enero de 2012

Quince.

Hoy simplemente quiero agradecer que día a día os paseis por aquí y leais lo que escribo. Y aun más, que me sigais :). Vale, no comentais mucho pero tampoco importa demasiado. Lo que me gusta es que poco a poco esteis haciendo de mi blog un sitio más grande. MUCHAS GRACIAS, que ya sois quince! :D

5 de enero de 2012

Papel.

¿Cuántas veces decidimos ser valientes y plantarle cara al miedo? Incontables. Siempre hay pequeños nuevos retos esperándonos a ver si damos el paso necesario y nosotros lo hacemos. Pero es muy difícil conseguir un resultado. Hoy puedo decir que he mirado al miedo justo a los ojos y me he sentido terriblemente pequeña. Sus gestos son rápidos y nerviosos y el descontrol sobre sí mismo es tal, que aún así es poderoso para controlarte. Entonces no sabes que hacer; ya no se trata de decir simplemente que vas a caminar pese a la oscuridad y vas a ser capaz de cruzarla, olvidando el miedo. Ahora la locura también camina tras tus pasos, intentando entrar en tu cabeza y controlarte también. Y la única salida posible que ves es justo huir. Y te evades en miles de historias que escribes, en libros, en alguna sonrisa; escapas de la única forma que conoces: desgastando un lápiz en un trozo de papel.

4 de enero de 2012

Gloria.

No hay nada que precipite un cambio; simplemente sucede. No hay ni una milésima de segundo que se libre de una decisión, de un acto, de una opinión. Todo en la vida son cambios y el tiempo no manda sobre ninguno de ellos, pese a que seamos sus esclavos. Somos marionetas de un gigantesco reloj, pero nosotros mismos podemos manejarnos a nuestro antojo. Las decisiones las tomamos nosotros; el cambio se produce porque queremos, sin más. Sin que el tiempo intervenga, sólo nuestra cabeza y, más frecuentemente nuestro corazón.
Que si algún día decidí perderme en tu mirada, no fue en un segundo, sino al saborear tus ojos. Que si quiero hacer de tu piel mi mapa favorito, no es porque en algún minuto me rozó, sino porque me gusta. Corazón de nuevo. Y por eso, simplemente por eso, arriesgo: porque si no lo hiciera, me arrepentiría. Prefiero mil veces seguir a mi corazón y dejarme llevar por lo que siento aún sabiendo que puedo equivocarme y caer. Porque en la vida, sin riesgo... no hay gloria.

2 de enero de 2012

Trece.

Nació el diez de diciembre de 1993 y sus ojos verdes son mi maldito delirio. Y qué decir de su sonrisa y los remolinos en mi estómago cada vez que la veo... Porque es ella, tan fuerte pese a todo lo que a veces la rodea. Es ella la que sale y le planta cara al mundo, al miedo, a los retos. Porque es ella quién aunque a veces cae, sabe levantarse. Con esfuerzo, mucho esfuerzo... Pero permanece arriba. Y si me pierdo viene, me busca... y me encuentra siempre. Y qué voy a decir yo de ella, si me pierde cada vez que mueve sus caderas mientras baila conmigo y le vuelve a plantar cara al miedo y a los relojes que la oprimen. Quién sino iba a ocupar ese lugar en mi blog, sino ella. Ese número que tanto me gusta, siempre tan imperfecto, justo lo que lo hace precioso. Sólo ella podría ser esa imperfección completamente perfecta: mi número trece.

1 de enero de 2012

Resaca.

Primer dia del año y te levantas, si cabe, más borracha que por la noche. Miras a tu alrededor y te ries; pero no por los efectos del alcohol, sino porque ves las llamadas perdidas de tus amigos a eso de las nueve de la mañana y dices: bendita noche. Porque has estado con ellos bailando, bebiendo, riendo sin parar todo el rato. Y fotos, risas, chupito, fotos, cubata, caídas, chupito, gorritos del cotillón, cubata, frio, frío y más frio. Y otro cubata más. Y así estas toda la noche. Y si te ries por la mañana no es sólo por saber que gente tan especial está a tu lado haciéndote grande, sino porque entre todas las lagunas que tienes, recuerdas esos momentos más especiales y aunque te estás muriendo del dolor de pies, cabeza y estómago... Son tus mejores amigos y es vuestra resaca.








P.D. Una de las mejores noches de mi vida con vosotros. Y no la última :D.